Cal Sitjo amplía su secuencia estratigráfica con nuevas dataciones de hasta 10.200 años
La sexta campaña de excavación en el yacimiento de Cal Sitjo (Sant Martí de Tous, Anoia), dirigida por el Dr. Bruno Gómez de Soler (IPHES-CERCA) y desarrollada entre el 27 de octubre y el 14 de noviembre, ha permitido ampliar y consolidar la secuencia cronológica del yacimiento con nuevas dataciones que alcanzan los 10.200 años antes del presente. Este avance refuerza el potencial de Cal Sitjo como un espacio clave para estudiar las comunidades del Mesolítico y del Neolítico en la Catalunya central, un periodo todavía poco documentado en la región.
Situado en la margen izquierda del Torrent de Tous, el yacimiento conserva más de ocho metros de depósitos fluviales cuaternarios (travertinos, arcillas y arenas) expuestos gracias a la erosión natural. Los diferentes análisis radiométricos obtenidos este año sitúan la secuencia entre 10.200 y 5.700 años antes del presente, un marco temporal excepcional que permite analizar con precisión la transición de las últimas sociedades cazadoras-recolectoras hacia los primeros grupos agricultores y ganaderos.
Según Bruno Gómez de Soler, “Cal Sitjo puede convertirse en un yacimiento clave para entender cómo se produjo la transición del Mesolítico al Neolítico en el noreste peninsular. Los datos que estamos obteniendo nos ayudan a reconstruir las estrategias de subsistencia y los cambios culturales de este periodo”.
Una campaña centrada en ampliar la secuencia y explorar nuevos sectores
Los trabajos de 2025 han permitido profundizar en los niveles neolíticos (nivel 4) y mesolíticos (niveles 7, 8 y 9) de la Cala 1, con superficies excavadas de 15 m² y 1 m² respectivamente. Paralelamente, se ha abierto la Cala 2, de unos 4 m² y situada a 15 metros al norte de la primera, con el objetivo de localizar niveles mesolíticos en cotas superiores e identificar estratos más antiguos que los documentados hasta ahora.
Un yacimiento privilegiado para estudiar los primeros grupos humanos de la Anoia
La potencia estratigráfica de Cal Sitjo y la presencia de elementos como hogares, posibles fondos de cabaña y agujeros de poste demuestran una intensa actividad doméstica y tecnológica. La abundancia de sílex en el entorno refuerza la importancia de este recurso en la fabricación de herramientas y en la organización económica de estas primeras comunidades.
Este conjunto de factores convierte Cal Sitjo en un yacimiento de referencia para analizar los procesos culturales y tecnológicos que marcaron la transición entre el Mesolítico y el Neolítico en la Catalunya central. Las futuras campañas ayudarán a completar esta secuencia única y a obtener nuevos datos sobre la organización social y las prácticas cotidianas de hace milenios.
Durante los trabajos, el concejal de Cultura de Sant Martí de Tous, Oriol Ribera, visitó el yacimiento para conocer de primera mano el estado y la evolución de la campaña. “Estas excavaciones contribuyen a poner en valor un espacio de enorme interés científico y patrimonial dentro del término de Sant Martí de Tous. Es una oportunidad para entender mejor nuestro pasado y reforzar el compromiso del municipio con la investigación y la conservación del patrimonio”, destacó.
Financiación y participantes
En la campaña han participado nueve personas, entre personal investigador del IPHES-CERCA y estudiantes de la URV y la UOC, junto con dos vecinos de Sant Martí de Tous, Javier Cámara (Universidad de La Laguna) y Vicenç Guinart, que se han integrado plenamente en las tareas de excavación y han contribuido de manera activa al progreso de la campaña.
La intervención se enmarca en el projecte quadriennal Territoris prehistòrics de la conca de l’Anoia (2022–2025), aprobado por el Departament de Cultura de la Generalitat de Catalunya.
Los trabajos han sido financiados por el Departament de Cultura (CLT009/22/00044), la AGAUR (017 SGR 836 – GAPS), el MICINN (PID2022-138590NB-C41) y el Ajuntament de Sant Martí de Tous, con el apoyo de la asociación Amics de Sant Martí de Tous y la colaboración imprescindible del propietario de los terrenos, Jordi Cañellas.





