Un nuevo estudio en el yacimiento de Lezetxiki (Arrasate, Guipúzcoa) confirma la presencia de neandertales mucho más tarde de lo que se pensaba
Las conclusiones publicadas en la revista American Journal of Biological Anthropology confirman también que los restos dentales analizados son los únicos pertenecientes a neandertales adultos de la región de los Pirineos occidentales
La aplicación de las metodologías más actuales al análisis de los restos humanos procedentes del yacimiento de Lezetxiki (Arrasate, Guipúzcoa), han permitido confirmar que se tratan de restos pertenecientes a los neandertales. Así lo ha constatado un equipo de investigación internacional que ha analizado dos restos dentales aislados recuperados durante los trabajos de excavación arqueológica en este tan emblemático yacimiento de la cornisa cantábrica. Los resultados de este estudio, publicados en la revista American Journal of Biological Anthropology, permiten confirmar una presencia neandertal tardía en el norte de la Península Ibérica.
La investigación ha sido coordinada por el investigador de la Universidad de Bordeux, Diego López-Onaindia, en la que han participado Marina Lozano, investigadora del Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES-CERCA) y de la Universitat Rovira i Virgili (URV), Aida Gómez-Robles, investigadora de la Universidad College London, Natural History Museum London, Álvaro Arrizabalaga, Universidad del País Vasco y Mª Eulalia Subirà, de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) y miembro del Grup de Recerca en Antropologia Biològica (GREAB).
Un yacimiento emblemático
El yacimiento de Lezetxiki se encuentra situado en el municipio de Arrasate (Guipúzcoa, País Vasco), en medio de un complejo kárstico con varias cavidades parcialmente desmanteladas. A pesar de ser descubierto en 1927, tuvieron que pasar casi treinta años para que se iniciaran excavaciones sistemáticas en este lugar. Estas excavaciones se realizaron en dos fases. La primera, entre 1956 y 1968, bajo la dirección de J.M. Barandiarán y la segunda, entre 1996 y 2018, bajo la dirección de Álvaro Arrizabalaga y Maria José Iriarte-Chiapusso.
Esta amplia tradición arqueológica hace que el yacimiento de Lezetxiki sea considerado un yacimiento histórico de referencia por el conocimiento de la prehistoria, especialmente en el norte de la Península Ibérica. A lo largo de su secuencia estratigráfica están representadas prácticamente todas las fases culturales de la prehistoria, con niveles correspondientes al Paleolítico inferior, medio y superior, proporcionando restos correspondientes a diferentes grupos humanos.
Momentos de transición
Esta sucesión de ocupaciones por parte de diferentes grupos humanos a lo largo del tiempo es un elemento muy importante para los investigadores, especialmente en lo que se refiere a los momentos de transición.
Éste es el caso del nivel III del yacimiento de Lezetxiki. En este nivel están representadas herramientas de piedra correspondientes al período cultural conocido como Musteriense; es decir, del período cultural correspondiente a los neandertales. Pero, al mismo tiempo, en este mismo nivel se han recuperado herramientas típicas del período Auriñaciense; es decir, el período cultural correspondiente al Homo sapiens. Este período de transición entre el Musteriense y el Auriñaciense es justamente uno de los aspectos más importantes que proporciona el yacimiento, por tratarse de un momento en el que los neandertales fueron sustituidos por los humanos anatómicamente modernos.
Las dataciones radiocarbónicas del nivel III han permitido determinar la importancia cronológica de los dos subniveles detectados durante las excavaciones: el IIIa con cronología auriñaciana 39.5-32.6 ky cal BP y el IIIb, con cronología musteriense, de al menos 46.5 ky BP. Además, los conjuntos líticos recuperados en este nivel se habían considerado plenamente musterienses en un primer momento. Sin embargo, los últimos estudios los clasifican como auriñacienses.
Los dientes han sido clave
En este contexto de reasignación cronológica y tipológica del material de este nivel, se hacía necesario reestudiar los restos dentales ya que todo ello ponía en duda su asignación taxonómica a los neandertales.
Los dientes estudiados, un diente molar superior y un premolar inferior, procedentes de las excavaciones sistemáticas llevadas a cabo por Barandiarán en 1966, han sido objeto de un nuevo análisis paleoantropológico, con la aplicación de nuevas técnicas y métodos como el estudio de la morfología externa e interna (análisis de los tejidos dentales) a partir de escaneados por microtomografía computarizada y morfometría geométrica. Los resultados obtenidos de estos análisis se han comparado con otros especímenes conocidos en el registro fósil del Pleistoceno medio, tanto neandertales, como humanos modernos del paleolítico superior y humanos modernos del neolítico. La conclusión es tajante: todos los indicadores obtenidos son consistentes con una clasificación neandertal de los restos.
A pesar de que existen otros yacimientos como Axlor (Vizcaya) o Arrillor (Álava) que también han proporcionado restos dentales adscritos a los neandertales, en ambos casos se trata de restos pertenecientes a individuos infantiles. En este caso, pues, los restos dentales del yacimiento de Lezetxiki se convierten en los únicos dientes pertenecientes a neandertales adultos de la región de los Pirineos occidentales recuperados en la actualidad.
Esta reasignación de los restos, junto con los nuevos datos procedentes de las dataciones radiométricas de los niveles de Lezetxiki, confirman una presencia neandertal mucho más tardía de lo que se pensaba en el norte de la Península Ibérica en este período de transición entre el Paleolítico medio y el superior.
Artículo:
López-Onaindia, D., Lozano, M., Gómez-Robles, A., Arrizabalaga, A., Subirà, M.E. 2023 Neanderthal teeth from Lezetxiki (Arrasate, Iberian Peninsula): New insights and reassessment. American Journal of Biological Anthropology, DOI: 10.1002/ajpa.24694